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falta de pilotos jets privadosAunque el crecimiento de la aviación privada se prevé muy alto, debe hacer frente a la carencia de profesionales y problemas de sostenibilidad medioambiental. La industria de los jets privados se prepara ante la falta de pilotos. 

La demanda de pilotos hasta el año 2038 se estima en 98.000 nuevos profesionales. Una cifra que será difícil de conseguir si no se aportan medios para hacer la profesión más accesible. Por ejemplo, estimulando la incorporación de mujeres y habilitando canales de financiación al aspirante.

La aviación corporativa es altamente atractiva. Cada vez hay más pasajeros que optan por este tipo de aviación, para evitar los inconvenientes de las aerolíneas comerciales.

Quienes optan por el lujo harán que esta industria crezca un 200% en los próximos años. Se calcula que firmas multinacionales y superfortunas compren cerca de 8.000 nuevos jets privados en la próxima década. La flota actual se estima en 4.600 aviones.

Aún así, la industria de la aviación privada tendrá un problema a medio plazo. Los nuevos pilotos prefieren volar en aerolíneas comerciales antes que en aviación corporativa.

Hay tres motivos principales por los que un piloto prefiere un aerolínea: ingresos, progresión profesional y estabilidad en las programaciones.

Los pilotos de un avión privado dependen de la continuidad del propio avión. Si el avión es vendido, se quedan sin trabajo. A pesar del estímulo profesional que supone un avión corporativo, muchos pilotos prefieren volar para compañías comerciales en lugar de empleadores privados.

 

La aviación corporativa y las aerolíneas están luchando por la captación de pilotos.

No solo los pilotos privados se están pasando a las aerolíneas comerciales, sino que además los nuevos pilotos salidos de escuelas son contratados en un plazo récord, sin dar opción a los operadores de jets privados.

Los fabricantes de aviones están considerando opciones. Construir aviones más fáciles de operar hará que sean más atractivos para los pilotos. Por otro lado, los aviones certificados para un solo piloto rebajan los requisitos de contratación.

Lógicamente, el uso de aviones que requieren un solo tripulante de vuelo es una forma de afrontar el problema, pero no el único. Iniciativas para entrenar y captar más pilotos, incluyendo la promoción entre mujeres para que opten por esta profesión, están de camino.

Otro reto que debe hacer frente la industria de la aviación corporativa es el impacto medioambiental y la movilización anti-avión, que está cobrando fuerza en toda Europa. La esperanza está en los motores eléctricos, que llegarán en los próximos años.

En cierto sentido, la falta de pilotos es un síntoma positivo: refleja la alta demanda en jets privados y aviación comercial. Sólo una profunda crisis global podría afectar las mejores previsiones. Sin embargo, incluso en un escenario de crisis, seguirían haciendo falta miles de nuevos pilotos.