Aerodynamics simulador A320 en MálagaLa Agencia Estatal de Seguridad Aérea española (AESA) ha certificado el simulador de vuelo Simloc A320, de categoría FTD + MCC APS en el Campus Aeronáutico del Aeródromo de Vélez Málaga.

Este dispositivo de entrenamiento en vuelo, entregado por Simloc el año pasado, está compuesto por un módulo semiesférico de fibra de vidrio y base fija, de 7 metros de diámetro por 4 de altura, en el que se integran una cabina real de A320; el sistema de visión directa de tres proyectores FullHD con una pantalla semicilíndrica continua de 3 metros de altura, que ofrece un campo de visión de 210° x 40° para cada piloto; el sistema de sonido y una moderna estación de instrucción (IOS).

Un gestor integral para el simulador

Simloc ha desarrollado para la IOS un software integral de gestión denominado Simulator Management Control Suite (Gestor de Control del Simulador) o SMC Suite, cuyo objetivo es ayudar al operador en la gestión de todas las funciones del simulador.

Mediante dos aplicaciones, la Simloc FSTD Manager y la Simloc IOS, el instructor puede, por ejemplo, realizar la gestión y control de usuarios, la programación y calendario de sesiones, el debriefing de la sesión o la gestión de incidencias de mantenimiento, entre otras funciones.

El modelo de vuelo, los sistemas y procedimientos del nuevo A320 de Aerodynamics están basados en el Paquete de Datos de Airbus (SSP), fundamentales para la certificación, con los que se consigue un comportamiento dinámico como el del avión real.

A partir de este momento la escuela puede ampliar su oferta de formación y entrenamiento con cursos de familiarización de cabina Airbus, pruebas de acceso a compañía, entrenamiento IR (RNAV, PBN, etc.), cursos MCC APS, TEM/CRM/EBT o programas MPL.

Nuevo simulador automatizado de ATC con IA

Además este dispositivo es, de momento, el único en España que incorpora el programa de simulación de control de tráfico aéreo (ATC) automatizado ASTi/SERA, con inteligencia artificial.

Este sistema permite a los alumnos interactuar de forma precisa con torres de control y gestionar adecuadamente las comunicaciones en vuelo, lo que contribuye a aumentar el realismo de las prácticas.

Por ejemplo, desde el arranque de motores hasta el aparcamiento en la plataforma, el piloto se puede comunicar con diferentes controladores que pueden tener distintos acentos según cambie de frecuencia y de espacio aéreo.