Cinco pilotos vieron objetos voladores no identificados entre 2014 y 2015, durante las maniobras de entrenamiento del portaaviones Theodore Roosevelt, según un informe de la Marina de los EEUU.
Los OVNIS fueron descritos como «objetos que no tenían motores visibles o estelas de escape infrarrojos» con «uno de ellos como una peonza girando contra el viento”. Los pilotos de la Marina no afirmaron directamente que los OVNI eran de origen extraterrestre. Sin embargo, tampoco pudieron identificar lo que estaban viendo, según ha publicado The New York Times.
Los OVNIs fueron descritos más adelante en el informe como «apareciendo a 30.000 pies, 20.000 pies, incluso al nivel del mar. Podían acelerar, disminuir la velocidad y luego alcanzar velocidades hipersónicas«. Un piloto describió a uno como «una esfera que encierra un cubo».
Un video supuestamente «mostraba objetos acelerándose a una velocidad hipersónica, haciendo paradas repentinas y giros instantáneos, algo más allá de los límites físicos de una tripulación humana».
SE INFORMÓ AL PENTÁGONO
El teniente Ryan Graves, un piloto del Super Hornet, ha estado con la Armada durante 10 años y reportó sus avistamientos al Pentágono y al Congreso.
Graves no se explica cómo podían esas naves permanecer tanto tiempo en vuelo consumiendo tanta energía. “Las aeronaves en el aire requieren una cantidad significativa de energía. Con las velocidades que observamos, 12 horas en el aire son 11 horas más de lo que esperábamos «.
Los avistamientos se informaron al poco conocido Advanced Aerospace Threat Identification Program, que analizó los datos de radar, las imágenes de video y las cuentas proporcionadas por los oficiales del portaaviones Roosevelt.
Uno de los pilotos que afirma haber visto a los OVNIs insiste en que aún no ha dado una explicación de lo que presenció.
EL ESCUADRÓN «RED RIPPERS» INTERACTUÓ CON UN OBJETO VOLADOR
El teniente Graves todavía no puede explicar lo que vio. En el verano de 2014, él y el teniente Danny Accoin, otro piloto de Super Hornet, entrenaron juntos. Formaron parte de un escuadrón, el «Red Rippers» VFA-11 de la Naval Air Station Oceana, que se estaba preparando para un despliegue en el Golfo Pérsico. Entonces interactuaron con los extraños objetos.
Los tenientes Graves y Accoin explicaron sus experiencias a The NY Times sobre los avistamientos. Otros tres pilotos en el escuadrón también hablaron con el periódico, pero pidieron no ser nombrados.
El teniente Accoin dijo que interactuó dos veces con los objetos voladores. La primera vez, después de captar el objeto en su radar, desvió su avión para seguir el OVNI, volando 1,000 pies por debajo de él. Dijo que debería haber podido verlo con la cámara de su casco, pero no pudo, a pesar de que su radar le dijo que estaba allí.
Unos días más tarde, hubo una cuasi colisión entre un piloto y uno de los OVNIs. Esto indica que, al menos en una ocasión, los pilotos no habían sido testigos de algún tipo de ilusión
óptica, sino de un objeto tangible.
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